Como parte del viaje a Austria, hicimos una parada en la ciudad de Grenoble para ascender esta ferrata que nos permite ascender hasta la Bastille.
Nosotros aparcamos en una gran explanada donde hay un parking de pago cerca del inicio. Por las prisas y por no ver exactamente donde empezaba nos pasamos el primer tramo, por lo que empezamos por el tramo más vertical y deportivo.
No es una ferrata demasiado difícil, pero tampoco es de iniciación. Al poco de iniciar el recorrido nos encontraremos con un desplome. Tras unos cuantos metros de ascensión, llegamos a una plataforma que nos permitirá descansar los brazos. Seguimos ascendiendo y llegamos a un punto donde podemos seleccionar el recorrido: por la izquierda más sencillo (k3) y por la derecha (k4) donde unas grapas alargadas nos ayudarán en el ascenso y nos obligarán a tirar de brazos.
Los 2 itinerarios se unen ya en las murallas, donde entraremos en el foso. A partir de aquí nos quedará el último tramos con un pequeño paso delicado que nos permitirá acceder a la Bastille por un ventanal.
Una vez arriba podremos descender con el teleférico o por el camino de descenso.
Una ferrata diferente una ferrata urbana, con cierta dificultad y con unas vistas espectaculares de la ciudad de Grenoble.
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| Al inicio del segundo tramo |
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| Una plataforma de madera nos permitirá hacer un descanso |
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| Final del segundo tramo, aquí se juntan las 2 vías |
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| El tercer y último tramo que asciende hasta los ventanales |
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