Nos habíamos acercado a estas tierras andaluzas con el objetivo de realizar la travesía de Hundidero-Gato, pero ya que nos hacíamos el mogollón de kilómetros, mejor aprovechar la zona para hacer alguna cueva más. Un de las escogidas fue la sima del Republicano, que Lolo ya había hecho un par de veces antes.
Los componentes de la actividad fuimos Lolo, Juani, Jose, Félix, Kiko y Toni.
Para llegar a la cueva, debemos seguir una pista que se inicia en la rotonda de la salida del pueblo de Villaluenga. Tras unos km llegamos a una puerta (no está cerrada con llave) pero por la que ya no se puede transitar a no ser que tengamos los permisos correspondientes, en ese caso pueden circular como máximo 2 vehículos. Siguiendo la pista que se encuentra en buen estado, llegamos a una segunda puerta justo antes de los Llanos del Republicano, un impresionante polje donde dejamos los vehículos. Dese allí, nos equipamos y seguimos el río que nos conducirá a la entrada de la cueva.
No es un cueva con grandes rápeles, pero sí con muchos pequeños pozos y rampas, que nos obligará a llevar bastantes cuerdas. Muy importante prever chapas de parabolts, ya que todos los pasamanos utilizan este tipo de instalación. También hay algún spit, pero son más viejos y no siempre hay.
El descenso lo fuimos haciendo sin complicaciones, intentando ahorrar al máximo las chapas que en nuestro caso eran escasas. Los primeros pasos están en fijo con cable de acero, otros pasamanos los tendremos que asegurar nosotros. Al final, llegaremos al último pasamanos donde también está instalado en fijo pero con cuerdas, un pasamanos largo y aéreo el cual pondrá a prueba nuestras fuerzas. Atención al inicio del pasamanos, que nosotros pasamos por alto y seguimos descendiendo hasta que tuvimos que retroceder si no queremos nadar. El pasamanos nos acerca a la cabecera del último pozo, que nos lleva al sifón terminal.
Tras comer algo, empezamos la dura tarea del ascenso. El encargado de la desinstalción fui yo y la verdad es que al final se va notando el cansancio, después de tantas horas de cueva las fuerzas empiezan a flaquear. Aún así, no hubo ninguna complicación y después de 10 horas ya estábamos todos fuera. Eso sí, reventados. Luego media hora más hasta llegar al coche.
Algunas notas: Es una cueva con agua, por lo que es recomendable el uso de escarpines, además sí o sí tendremos que meter los pies en el agua para vadear una sala. No es es necesario neopreno. Como mucho nos mojaremos hasta las rodillas. No es una cueva muy fría, pero sí con mucha humedad. Un forro y unas mallas debajo del mono de espeleo se agradecen.
Un buen lugar para alojarse es el albergue de la federación espeleológica andaluza en Villaluenga del Rosario, donde nos trataron estupendamente.
Una cueva, que me sorprendió muy, pero que muy gratamente. Pedazo de cueva!!!
Por último añadir que es necesario solicitar permiso para acceder a esta sima.
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Camino de la boca |
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La gran boca al fondo |
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Hay varios pasos como este |
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Bordeando el agua |
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En esta sala sí o sí tendremos que mojarnos los pie |
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El último pasamanos |