Aprovechando el viaje de regreso de Eslovenia nos acercamos a la población de Foresto para recorrer esta vía ferrata. No tenía mucha información, ya que fue algo "improvisado" pero ahora puedo decir que menudo descubrimiento. Valió la pena.
Dejamos el coche en el pueblo y en apenas 15 minutos llegamos al inicio de la vía. Se trata de una vía peculiar ya que va remontando un barranco, luego pudimos comprobar que se trata de un barranco equipado y que se puede descender así que una buena actividad habría sido ascender por la ferrata y en el momento en que ésta ya se aleja del barranco (su tramo final) ponernos los neoprenos y regresar al punto de inicio por el barranco, pero como digo esto se nos ocurrió después...
Como decía, la ferrata va remontando el barranco por lo que iremos ascendiendo por zonas engoradas, al lado de cascadas, etc. No es un ferrata difícil, pero tampoco un paseo, en mi opinión una K3 o K3+ . Los primeros metros son horizontales y a poca altura del río, luego ya empezamos a ganar altura hasta cruzar el primer puente tibetano. Seguiremos por el margen izquierdo del barranco hasta de nuevo cruzar al margen derecho por otro puente tibetano. A partir de aquí empezamos por la parte más engorada y espectacular, donde tendremos que superar un pequeño desplome y donde el estruendo de la cascada nos acompañará durante el ascenso.
Cruzaremos de nuevo el río, aunque esta vez a ras de suelo, y volveremos a ascender hasta el último puente (el más alto) que nos permitirá cruzar de nuevo el río.
Seguiremos por la vertiente derecha hasta que empezaremos a ascender por la pared abandonando el río. Poco a poco iremos ganando altura hasta llegar al final de la vía.
nosotros esta última parte la hicimos a toda leche, ya que empezaron a caernos unas gotas y unos truenos presagiaban lo peor, ya sabemos lo peligrosa que puede ser una tormenta en una vía ferrata... Al final conseguimos terminarla en el momento que empezó a llover a lo bestia... justito, justito... así que nos tocó hacer el camino de vuelta al pueblo totalmente empapados. Pero bueno, igual que vino la tormenta se fue y un sol espléndido nos invitó a volver de nuevo al inicio de la vía a darnos un buen baño en el río, en la base de la primera cascada.
En fin, una ferrata que nos gustó muchísimo, por su un entorno privilegiado. Muy recomendable.
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| Ascendiendo la primera cascada |
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| Primer puente tibetano |
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| El segundo puente nos llevará de nuevo a la derecha del barranco |
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| Iniciamos la zona más engorgada |
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| Ascendiendo a lado de la cascada |
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| Cruzando el último puente |
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| La parte vertical donde ya abandonamos el río |
