Sima los Posos. Azuébar. Castelló.

El fin de semana se acercaban a València unos amigos de Madrid. Una de las actividades que habíamos planeado era la visita a esta cavidad que tanto nos había gustado la primera vez que la recorrimos, avanzando por el río subterráneo y superando el laminador sifonante. Pero las cosas no salieron como habíamos pensado...

Fran fue el encargado de instalar, pero tuvimos problemas a los pocos metros de la entrada, ya que hay que superar un paso bastante estrecho, cosas de la espeleo, uno de los componentes no lo vio claro, y aunque fue capaz de superarlo, decidió dar media vuelta y salir. Otro de los miembros del grupo tampoco pudo superarlo por culpa de la saca,... otro decidió no bajar y el último viendo el fracaso de sus predecesores, lo intentó con muchas risas pero con poca fe, por lo que tampoco lo superó.

Así, que al final sólo bajamos Fran (el único que no conocía la cavidad), Raquel y Toni (yo mismo).

Tras llegar a la base del pozo, nos pusimos el shorty y nos metimos en el agua, recordaba un paso por el agua con techo bajo, pero tanto? Me había metido por el lado que no era, donde arrastrándome empecé a avanzar metros y metros, hasta llegar a un punto que casi no podía sacar la cabeza del agua... por ahí no podía ser. así que media vuelta y cogimos el otro camino, el correcto (mirando la pared del pozo por la que bajamos, es el de la derecha).

A partir de ahí recorrimos el camino río abajo y luego río arriba hasta llegar al laminado sifonante. Impresiona como siempre, pero recordaba perfectamente como superarlo) por el centro hacia la derecha), por lo que al final lo superé sin muchas dificultades. Tras visitar parte de la cavidad después del laminador, volvimos por nuestros pasos. Poco a poco y con alguna pequeña dificultad en el paso estrecho poco antes de la salida llegamos al exterior.

Por cierto, luego nos enteramos que Pedro al final sí que bajó, pero cuando llegó a la base del pozo ya no nos encontró, y como no conocía la cavidad y no tenía la topo decidió dar media vuelta y volver a subir.

Sin duda, una de las cavidades más interesantes de Castelló. Tendremos que volver de nuevo a ver si esta vez todos los compañeros que no pudieron bajar lo logran.

Aquí tenéis un enlace a la anterior entrada.

El pozo de entrada

Gateando hacia el río subterráneo

Avanzando aguas abajo

Toda la cavidad está cubierta de barro

Una de las formaciones más características