De vuelta de los días que habíamos pasado por Almería decidimos hacer un alto en el camino para disfrutar de esta vía ferrata murciana.
Para acceder a la ferrata desde el albergue de montaña de Siula seguimos la carretera que nos lleva prácticamente hasta su base. La aproximación y retorno es inmediato. El entorno donde esta ubicada la ferrrata es espectacular, una especie de circo formado por altas paredes verticales. La ferrata es vertical ganando altura rápidamente, con pasos interesantes. Una vez se llega a la parte más elevada de la errata una tirolina impresionante por su altura y de unos 50 m de longitud y que nos permite cruzar a la pared contraria. Por esta pared seguimos unos metros hasta llegar a la segunda tirolina que de nuevo nos permite cruzar a la pared inicial. Ambas tirolinas tiene poco desnivel sobretodo la segunda, por lo que es difícil chocar con la pared contraria. Desde el final de la segunda tirolina que seguir el itinerario hacia la derecha, ya que nos lleva hasta el inicio del rápel de 30m. Este rápel es sencillo pese a su altura y muy estético, el cual una vez descendido nos permite llegar al inicio de la vía para emprender el corto camino de regreso al coche.
Es una vía interesante, que nos sorprendió gratamente por su entorno, belleza y sobretodo por sus tirolinas. Muy recomedable aunque un poquito "corta" por poner una pega, a nosotros nos costó poco más de una hora.
Si esta actividad se nos queda corta, siempre podemos completarlas con el barranco del mismo nombre que comparte el último rápel con el de la ferrata.
Una vez terminada la vía nos acercamos al albergue a tomarnos unas cervezas y comentar la atividad. El albergue un buen sitio para pasar un fin de semana por la zona, conociendo la Sierra de Espuña, volveremos.
El inicio sube en diagonal con clavijas en T |
Impresionante tirolina por su altura |
El rápel final |
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