Sima Alfa 2. Valsalobre. Cuenca

Por diferentes circunstancias, desde el verano pasado no habíamos hecho una quedada del Interclub Espeleo Vaslencià, esta vez nuestros compañeros del Club Viana, prepararon un encuentro en Valsalobre por lo que para Cuenca fuimos para pasar un fin de semana de espeleo y por supuesto diversión.

Desde aquí aprovecho para dar la enhorabuena a los compañeros del Club Viana, por la organización. El encuentro estuvo genial, de verdad mil gracias por todo el esfuerzo y dedicación.

Tras la cena del viernes, nos distribuimos en grupos cada uno con distintos acometidos y para distintas cavidades. Unos para explorar, otros 2 grupos para realizar un par de escaladas y el mío para topografiar la Alfa 2, que aunque ya existe una topografía parece que no es del todo fiel a la realidad.

Tras llegar a la boca nos equipamos y nos repartimos las tareas. A mi me toco la instalación y a Pedro y el otro compañero la tarea de topografiar.

Pedro que conocía bien la cavidad, nos advirtió del problema de la falta de oxígeno (como sucede en algunas otras cavidades de la zona) por lo que cogimos un medidor por seguridad.

Tras descender unos 4 o 5 metros, puse el medidor en marcha y el aparatito empezó a pitar como loco!!!! Pedro me preguntó cuanto marcaba y leí "10,4!!".

"Vale Toni, sube lo antes posible, vas a perder el conocimiento en menos de un minuto." Me comentó Pedro. No olvidaré nunca esas palabras, pero agradezco con la calma y frialdad con las que las dijo (no era cuestión de ponernos nerviosos).

Mientras hacía un cambio de aparatos lo más rápido posible, Pedro me lazó un cabo parta que me anclara a él y poder izarme cuando me quedara inconsciente.

Siempre digo, que una de las cosas que se aprende al hacer todos estos deportes de aventura, es a mantener la calma en cualquier situación... y aunque el corazón latía a toda velocidad no me puse nervioso e hice el cambio de aparatos sin problemas (no era cuestión de cometer un error colgado en un pozo de 20m de altura). Además, los pitidos del medidor de oxígeno no ayudaban a mantener la calma que dijéramos....

Empecé a "yumear" y en unos segundos estaba fuera y a salvo!!!!! Uf!! Menudo susto.

Con calma y en la seguridad del exterior bajamos el medido con una cuerda, la sorpresa fue que no era 10.4 si no 18.4 había confundido el 8 con un 0 pensando que se trataba de la raya en medio utilizada en informática para diferenciarlo de la letra "o" (deformación profesional).

Así que pasado el susto y con mucha prudencia volví a bajar, esta vez midiendo cada pocos metros.

En la base del pozo ya marcaba 17.8 por lo que seguimos con el descenso. En el siguiente pozo, hay que pasar una estrechez y en ese punto ya marcaba 17.4 me encontraba bien, por lo que seguimos con el descenso.

Llegando a la cabecera del penúltimo pozo, marcaba 17.3 por lo que poco a poco y con calma seguimos descendiendo. He de comentar que antes de cada descenso me ataba a una cuerda de seguridad por si era necesario "subirme".

En la base del último pozo, marcaba 17.1, pero en la cabecera del último ya bajaba de 17 por lo que decidimos no arriesgar y no bajar ya que no había continuidad.

Desde ese punto tomamos la medida del pozo y empezamos con la topo. 

Si mayor problema, fuimos desinstalando y recorriendo el camino inverso topografiando. Aprovechamos también para atravesar una gatera que nos conduce a la base del primer pozo.

Cuando esté lista la topografías la publicaremos.

Al final un buen día de espeleo con una "anécdota" más que contar (menos mal que al final todo quedó en eso) .

La boca de la cavidad

Los 3 componentes antes de entrar

Descendiendo el pozo de entrada

Tomando la medición con el medidor de oxígeno después de la estrechez del 2º pozo

Accediendo a la cabecera del 3er pozo

Durante el ascenso

Atravesando la gatera que conduce a la base del pozo de entrada

Tomando medidas para la topo