La sima elegida esta vez fue L'Avencó, en La Vall D'Ebo y el grupo de espeleólogos lo formamos Manolo, Lolo, Carmen y Toni. Como Carmen y Lolo ya han hecho la sima un par de veces no tuvimos problemas para encontrar las bocas aunque éstas son bastante pequeñas. De las 3 bocas, entramos por la que da acceso a la vía más profunda, ya que la idea era descender hasta el final de la cavidad (-119m) lo que conseguimos sin demasiados problemas. Durante el ascenso, Manolo y yo nos adelantamos y aprovechamos para descender a la famosa sala de las Maravillas, sinceramente valió la pena. En fin, una cavidad deportiva, bonita y muy recomendable.
Por último, saludar a los 2 componentes del grupo espeleológico de ¿Cocentaina? con los que coincidimos y que nos acompañaron en el descenso hasta el pozo de acceso a las sala de las Maravillas.
Recién llegados a la boca.
Carmen iniciando el descenso
Toni (o sea yo) en el pasamanos
Manolo, "posando" en un rincón con bellas formaciones en el fondo de la sima.
En la
base del último pozo. Quizás no es tan expectacular como las sala de las
maravillas, pero recomendable al 100%
Una detalle de la sala de las Maravillas
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