miércoles, 9 de julio de 2025

Prisank (Prisojnik), Alpes Julianos, Eslovenia

En nuestra semana de turismo por Eslovenia, tuve la ocasión de escaparme para subir a esta emblemática montaña, que con sus 2.547 metros es la decimoctava más alta del país, no muy lejos de los 2.864 metros del Triglav, que es la más alta.

Decidí subir por el lado norte, atravesando un agujero enorme que llaman el "Okno". Es un camino equipado a ratos con clavijas y cables, por lo que es altamente recomendable llevar arnés, disipador y casco. La gente acostumbrada a andar por alta montaña y terreno rocoso, a veces algo expuesto, y que esté en forma (la subida supone más de 1.000 metros) no tendrá problemas.

Ya sólo subir con el coche al puerto de Vrsic es interesante, tendrá más de veinte curvas de herradura, y ver subir el puerto a los ciclistas cansa. En el puerto hay mucho aparcamiento gratuito (muy raro en este país), pero si vas en hora punta, es posible que te cueste encontrar. En mi caso, eran las 6:00 am, así que casi estaba yo solo.

Después de andar brevemente por la carretera y coger una pista forestal a la izquierda, enseguida llegué al hotel Ticarjev Dom (no confundir con el refugio Postarski Dom, que está más arriba, y por el que no pasé), y seguí adelante hasta el desvío hacia el Okno. La ruta está muy bien indicada con postes y círculos rojos rodeados de blanco, así que es difícil perderse. Llegamos a un punto en el que hay un cartel informativo del camino equipado, donde hay que desvisarse. Desde aquí también se puede ver al frente una pared rocosa que da la impresión de ser la cara de una chica, "la chica pagana", lo llaman. El camino pasa al lado o por debajo de esa pared.


Cartel explicativo de la ruta


La "chica pagana"

Una vez cogido el desvío, se baja un poco, y llegamos a un primer tramo equipado que supera un promontorio, y en el que vale la pena ponerse ya arnés y demás porque enseguida empieza la verdadera subida. Empieza fuertecilla, con un flanqueo y una subida un poco más vertical, ambos equipados, pero es casi lo más vertical de la ruta, y después de este comienzo prometedor, en general se trata de subir andando por roca, con trepadas fáciles y seguir las abundantes marcas, habiendo poca verticalidad. En algunas clavijas donde no hay nada de patio incluso no me aseguré, y así fui más rápido.

Las vistas impresionantes, sobre todo hacia la zona de Mojstrovka, otra montañaca al lado opuesto del puerto de Vrsic. Más o menos a mitad de subida se atraviesa una pequeña grieta interesante donde tuve que reptar un poco, y sin sufrir mucho llegué al famoso Okno, precedido por un nevero bastante grande, pero que se quedaba abajo, así que no me fastidió (no llevaba crampones ni piolet).


El primer tramo equipado, casi que el más vertical


Mojstrovka, al otro lado del puerto de Vrsic


Todo oxidado, pero en buen estado



El "Okno"

El agujero en la roca, impresionante, yo creo que cabría dentro un edificio de 5 plantas. Se sube hasta él por la orilla derecha, evitando la tartera de piedra fina, que debe ser penosa de subir, y se atraviesa subiendo una gran pared tumbada.de roca, equipada con grapas.


Ya al otro lado


Vistas hacia el SO





La cima del Prisank, aún algo lejos

A partir de aquí, vistas grandiosas al otro lado, con multitud de cimas rocosas muy escarpadas, circulando por una cresta bastante ancha, asegurada en algunos tramos, con algún paso no asegurado en el que no hay que confiarse porque una caída hacia el lado norte sería muy fea, y finalmente llegué a la cima.

No había nadie, así que disfruté un montón del momento y de las vistas, con nubes altas que sólo tapaban la puntita de lo que supuse sería el Triglav.


En la cima




Al fondo lo que debía ser el Triglav


En centroeuropa se ha puesto de moda los cuños


Después de estar un buen rato, empecé a bajar, al principio por el mismo camino de ida, pero luego por la cara sur (en el desvío hay señales pintadas en la roca, estar atentos), que es más fácil: tiene un par de cortos tramos con clavijas, sin más, pero en cualquier caso es terreno muy rocoso y empinado que pondrá a prueba nuestras rodillas y donde no nos podemos relajar porque cualquier pequeña caída puede doler bastante.

En la bajada por el sur, comprobar indicaciones en el suelo

Bajando me encontré con los primeros montañeros del día, un padre y su hijo, bastante pequeño, y más abajo con un par de polacos, con los que hablé un poco. Después de una canal que se me hizo bastante larga, por fin llegué a una senda menos empinada y sin rocas, donde ya puede avanzar más rápido y relajarme, hasta volver al punto de inicio, rodeando el Prisank por su cara oeste.


¡Por fin una senda como Dios manda!


La pedrera en la cara oeste, se anda genial


La actividad en total me llevó un pelín menos de 5 horas (paradas incluidas), yendo ligero (pero obviamente no soy Kilian Jornet). La subida hasta la cima, un poco menos de 3 horas.

Subiendo más tarde durante el día con mi familia de nuevo al puerto de Vrsic, paramos en un mirador desde el que el Okno y la ruta hasta él parecen sólo al alcance de escaladores, moló mucho ver la cara de mi mujer y mi hija diciendo: ¿de verdad has subido por ahí? 😆


Prisank desde el mirador, en rojo la ruta de subida, aproximada




No hay comentarios:

Publicar un comentario